Apollo Creed está tendido en los brazos de su antiguo adversario, Rocky Balboa. Después, en la secuencia de la conferencia de prensa, su oponente, el ruso Ivan Drago, sólo se limita a decir con indiferencia: “Pues si se muere, pues se muere”. Este suceso –así como la eventual revancha del Italian Stalllion– fue el motor detrás de Rocky IV y ahora, 33 años después, será la chispa que encienda el fuego de venganza en Creed 2, a través del hijo de Apollo, Adonis Creed.
“Fui invitado a la premiere de Creed y justo antes de que empezara la película pensé: ‘yo soy quien mató a su padre, la gente me va a odiar’”, nos confesó desde Nueva York el actor que antiguamente interpretara a Drago, Dolph Lundgren.
A pesar de la gran rivalidad entre las familias Creed y Drago, lo más importante para el actor Michael B. Jordan (Creed) es que no se trata solamente de una historia de venganza. “Como secuela había expectativas que llenar, pero queríamos un acercamiento fresco a lo que pudo haber sido una simple historia de venganza”.
La nueva película girará en torno al éxito internacional de Adonis, sus nuevas tensiones con Rocky y su relación con Bianca (Tessa Thompson) como padres novatos. No obstante, el arco dramático principal comenzará cuando el hijo de Ivan, Viktor Drago, rete a Creed a una batalla por el campeonato mundial. “En la primera no existía un villano porque era más una historia de origen”, nos reveló Jordan.
Ahora, Sly [quien coescribió el guion] estaba más seguro de querer un antagonista. Y aunque sí es importante el pasado que existe entre Drago y Creed, es una historia que lleva su propia identidad.
Nuevos entrenadores
Para sostener el legado de Rocky y de la alabada primera parte de esta nueva historia, la producción enlistó al director Steven Caple Jr., un cineasta que comparte ADN fílmico con Ryan Coogler (quien no pudo regresar por su compromiso con Black Panther): ambos son graduados de la prestigiosa USC School of Cinematic Arts. En entrevista, Steven nos reveló lo orgulloso que se siente de pertenecer a una generación de directores afroamericanos como Coogler o Ava DuVernay (Selma; Un viaje en el tiempo):
Los sigo admirando y me emociona el hecho de que esto sea un gran proyecto colectivo.
Adonis Creed está por enfrentarse al mayor reto de su vida. Sin embargo, con tal equipo de apoyo en su esquina, el encuentro entre EE. UU. y la antigua Unión Soviética (algo que además, tres décadas después, sigue siendo profundamente relevante) promete hacer retumbar las pantallas.